El psicólogo transpersonal Stan Grof sobre el 2012: Nuestra conciencia puede crear la realidad
AlterCultura
Por: Luis Alberto Hara - 09/08/2010
Por: Luis Alberto Hara - 09/08/2010
Uno de los psicólogos más brillantes de nuestra época, continuador del trabajo de Carl Jung y Wilhelm Reich, Stanislav Grof es entrevistado por Daniel Pinchbeck, el editor del sitio Reality Sandwich y coproductor del documental 2012 Time for Change.
En una entrevista relajada y casual, Grof nos introduce a sus aportaciones a la psicología moderna, particularmente el acercamiento a la psique desde la transpersonalidad, una ampliación de los conceptos de arquetipo e inconsciente colectivo de Jung; las 4 matrices perinatales que remiten a las experiencias traumáticas del nacimiento desde la simbología; y las experiencias holotrópicas, a través de los psicodélicos o a través de técnicas de meditación y respiración.
Mientras que la psicología freudiana se limita a lo que ocurre después del nacimiento –al nacer somos tabula rasa-, Groff trabajando en regresiones y con psicodélicos notó que el proceso previo y durante el nacimiento es una fuente onerosa de trauma. Agrupo este proceso en 4 matrices perinatales que corresponden a procesos arquetípicos.
-La primera matriz perinatal corresponde al tiempo de concepción hasta la contracción intrauterina.
-La segunda matriz va del momento de la contracción intrauterina hasta la entrada al canal del nacimiento.
-La tercera matriz es completada cuando el feto atraviesa el canal del nacimiento.
-La cuarta matriz corresponde al nacimiento como un cuerpo independiente.
Grof ha notado que la conciencia humana existe desde estas etapas a través de regresiones y que tiene una extraordinaria sensibilidad, por lo cual percibe cualquier modulación y alteración que ocurre en el viente, por lo cual la traumatización es tan fácil de darse. Cada etapa corresponde también a un proceso simbólico, por ejemplo la matriz perinatal 4 completa el viaje al inframundo y hacia la luz, similar al que realizan los chamanes, hasta su nacimiento o vuelo mágico.
La humanidad se encuentra en la matriz 3, envuelta en imágenes violentas y sexuales, antes de poder nacer, el feto recibiendo las contracciones de la madre, con un riesgo de sofocación fetal.
La primera matriz corresponde a Neptuno, la segunda a Saturno, la tercera a Plutón y la cuarta a Urano.
Grof sostiene haber hallado una relación entre el campo arquetípico de una experiencia holotrópica (que tiende o que se mueve hacia la totalidad) o psicodélica y estas matrices astrológicas, tal que el momento en el que se realiza una de estas experiencias influye en las imágenes y arquetipos que se generan dentro de la experiencia. Algo similar a lo que el alquimista Paracelso había ideado con su astrobotánica.
Grof quien experimentó en múltiples ocasiones con el LSD como parte de su terapia transpersonal, cree que existe un malinterpretación en el término “estados alterados”, cuando en realidad los estados profundamente psicodélicos y holotrópicos más que ser distorsiones o alucinaciones permiten a la conciencia un entendimiento del propio ser faltante, llegan a completar el círculo del mandala de la personalidad. La terapia holotrópica de Groff logra sanar los traumas perinatales, destapando una gran cantidad de bioenergía.
Pinchbeck, que en su camino con las drogas se ha topado con más de un ente o “espíritu maligno”, como lo llama, le pregunta sobre esto a Grof, quien contesta que “depende de lo que creas que eres, si eres un ego con un cuerpo, entonces los espíritus parecen estar afuera de ti y ser independientes, pero si crees que eres, como los hindúes, una parte de Brahma, entonces los espíritus son un aspecto de ti mismo”. Y añade que en la psicología transpersonal todo lo que experimentas tiene un referente subjetivo. Aunque “sólo existe un sujeto en el universo que tiene capacidad de producir sujetos escindidos” y las fronteras, en las experiencias holotrópicas, “se vuelven negociables”.
2012
Grof cree que el 2012, como gen cultural, es parte de un concepto de muerte renacimiento. Su perspectiva se ubica cercana al Maia hindú, donde el mundo es un drama divino, un teatro cósmico, con un guión, “y sería una buena historia que los mayas hubieran predicho esto”.
El psicólogo checo parece jugar con estas tres palabras: maya, maia y matrix, y dice que “nuestra conciencia puede crear realidades… de las sesiones psicodélicas me queda claro que podemos estar en un mundo convincente, por esto no es imposible que la conciencia haya creado la experiencia de este mundo material, tal vez en 20 años cuando la tecnología de la realidad virtual se haya amaestrado nos quedará muy claro que sólo porque experimentamos algo no significa que necesita estar ahí, puedes crear un mundo orquestando experiencias.”
Grof añade que actualmente los hologramas están cerca de fingir una experiencia, pero les falta engañar al tacto y al olfato, pero que una vez que esto se logre, sería muy difícil decir si lo que experimentamos es real o es virtual.