El nacimiento del Universo no requirió de un dios creador: Stephen Hawking
Ciencia
Por: Luis Alberto Hara - 09/03/2010
El más famoso científico inglés, Stephen Hawking, asegura que el Universo se autocreó, configurándose a sí mismo sin la necesidad de un dios de por medio.
A pesar de que la negación de un Dios creador ha sido un postulado esencial para la ciencia, las declaraciones de Stephen Hawking, en las que afirma tajantemente que el Universo no requirió de un dios para emerger de las entrañas, ha sacudido la opinión pública alrededor del mundo.
Stephen Hawking es sin duda el científico vivo más famoso de Inglaterra, y muy probablemente del mundo. Su épica obra publicada en 1988 A Brief History of Time [Una breve historia del tiempo], le valió un lugar en el salón de la fama de la ciencia. En parte porque su trabajo permitió el acceso de un público relativamente masivo a conceptos que hasta entonces habían permanecido vedados para la mente “común”.
En el nuevo libro The Grand Design, del cual fue publicado un extracto en la revista Eureka, el celebre científico es claro al afirmar que “Por la misma razón que existe una ley como la gravedad, el Universo puede y seguirá creándose a sí mismo a partir de la nada. La creación espontánea es la razón de que existe algo en lugar de la nada, y por eso el Universo existe, y nosotros existimos”.
Por el momento que vivimos actualmente, en el que pareciera que el pulso del misticismo y la espiritualidad se está renovando y refortaleciendo, tal vez en respuesta a la decadencia palpable de los sistemas que han regido durante siglos nuestras estructuras sociales, financieras y morales, las declaraciones de un científico famoso y legitimado, en el sentido de una negación contundente de la presencia de un dios como autor o siquiera testigo de la creación del Universo, provocó que una porción importante de la psique colectiva se tambaleará. El resultado es que la afirmación de Hawking recorrió en unas pocas horas el mundo colocándose como una de las notas más leídas en muchos de los medios más importantes .
“No es necesario invocar a Dios como el encargado de activar el botón azul y arrancar con ello el Universo”, añadió. Curiosamente en su libro Una breve historia del tiempo incluía, al menos colateralmente, la presencia de Dios: “Si descubrimos una teoría completa, sería el máximo triunfo de la razón humana, pues en ese momento conoceríamos la mente de Dios”.
Sin embargo, parece que ahora Hawking ha vivido un proceso opuesto al de la religión, es decir, se ha desligado gradualmente de Dios, incluso contradiciendo a Sir Isaac Newton en su afirmación de que el Universo no había emergido espontáneamente sino que fue activado por la mano de Dios. Y ya en junio pasado, durante una entrevista para el Canal 4 inglés, el científico había declarado: “La pregunta es: ¿la manera en la que el Universo comenzó fue elegida pro Dios por razones que no podemos entender o fue determinada por una ley de la ciencia? Yo creo en lo segundo. Si te gusta puedes llamar a las leyes científicas 'Dios', pero no sería un Dios personal al que conocerías, ni podrías hacerle preguntas".
Finalmente, y gracias a estas declaraciones de Hawking y a la reacción que generaron, se detona una reflexión en torno a la naturaleza que hemos adjudicado culturalmente a la figura de Dios. Y quizá precisamente esta interpretación es la que podría estar “muriendo” y con ello podría surgir una nueva concepción de la deidad unificada, una especie de fuerza omnipresente, exenta de preceptos como el tiempo, el espacio, y la forma y que más bien sea autoproyectada como la máxima expresión de una aleatoriedad mística. Dios como caos.
Praise Eris…