En el año 2015, investigadores de Pfizer descubrieron que uno de sus medicamentos estrellas, Enbrel, utilizado para combatir la artritis reumatoide, parecía disminuir el Alzheimer hasta en un 64%. Esto fue mostrado por el análisis de miles de reclamaciones de seguros. Sin embargo, verificar esos resultados costaría mucho dinero y varios años de pruebas clínicas. En una presentación interna de la compañía se lee:
Enbrel podría potencialmente prevenir, tratar y retardar la progresión de la enfermedad de Alzheimer de forma segura.
El año pasado la gigante farmacéutica anunció que dejaría de investigar nuevas medicinas, el tratamiento del Alzheimer y la enfermedad de Parkinson. Se dijo que la compañía había invertido infructuosamente en esas áreas y la empresa informó a sus inversionistas que su dinero estaría mejor invertido en otros ámbitos de investigación.
En un comunicado, Pfizer señaló que se trataba de "un ejercicio de reasignación", orientado a áreas donde su "pericia científica es más fuerte". Pero al hacer esto, según reveló el Washington Post, la empresa optó por no mencionar ni compartir los resultados del estudio que, como dice la BBC, podrían tener "grandes implicaciones en la batalla contra el Alzheimer", siendo esta enfermedad uno de los grandes retos que enfrenta la ciencia.
Más allá de que resulta por ahora sólo especulativo determinar las razones por las cuales Pfizer eligió descartar esta línea de investigación -aunque la empresa argumenta que se trata de una falsa pista, pues el medicamento no "penetra efectivamente en el tejido cerebral"- lo que resulta muy cuestionable es que no se hayan hecho públicos los resultados. Pfizer argumenta que no quería que los investigadores se fueran por un "camino inválido".
No obstante, la comunidad científica señala que éticamente era importante dar a conocer esos resultados. Diversos investigadores consideran que estos datos eran (y son) sumamente valiosos para los científicos, independientemente de si el medicamento tuviera una aplicación plausible como tratamiento o no. Algunos sugieren que la razón por la cual Pfizer dejó de lado esta línea de investigación tiene que ver con que el Enbrel ya no está protegido por una patente exclusiva, es decir, no podía ser ya el nuevo Viagra de Pfizer. Como es de esperarse, Pfizer niega esto y argumenta que fue solamente una decisión basada en la ciencia.