Algo se dirige hacia la Tierra y los científicos aún no tienen idea de qué demonios es. La Agencia Espacial Europea informa que se espera que un pedazo de basura espacial apropiadamente bautizado WT1190F toque tierra el 13 de noviembre de 2015.
Lo que se sabe al respecto es realmente poco: WT1190F al parecer es relativamente pequeño. Es probable que se incinere en la atmósfera durante su reinserción, con algunos de los trozos restantes esparciéndose en algún lugar cercano a la costa de Sri Lanka.
La propia Agencia dice en su página:
El extraño reingreso el próximo mes de lo que se sospecha que es un trozo de cohete desde una órbita muy alta ofrece una excelente oportunidad para reunir datos para mejorar nuestro conocimiento de cómo los objetos interactúan con la atmósfera terrestre.
¿Sabemos de dónde viene? No. En apariencia no es un objeto peligroso para la Tierra. Según la ESA (por sus siglas en inglés), la agencia Near-Earth Object Coordination Centre seguirá de cerca el comportamiento del objeto próximo a nuestro planeta.
"El primer objetivo será comprender mejor el reingreso de los satélites y los escombros de órbitas muy excéntricas", dijo el astrónomo del NEOCC Marco Micheli al sitio web de la ESA. "En segundo lugar, proporciona una oportunidad ideal para poner a prueba nuestra disposición ante los posibles eventos de entradas atmosféricas futuras que impliquen un asteroide, ya que los componentes de este escenario, desde el descubrimiento hasta el impacto, son todos muy similares".
Estados Unidos “está monitoreando” al WT1190F como parte de un sistema de vigilancia mucho más grande diseñado para “evitar sorpresas en el espacio” como, por ejemplo, que la basura que hemos lanzado a él se rebele y comience a atacarnos.
Ya nos podemos ir imaginando posibles títulos para futuros filmes hollywoodenses: Cuando la basura nos alcance, La basura contraataca o Lo que la basura se llevó. Afortunadamente, al final los humanos araremos nuestra propia tumba.
[caption id="attachment_102126" align="aligncenter" width="720"]“El Joint Functional Component Command for Space's Joint Space Operations Center (JSpOC) se encarga de operar la Red de Vigilancia Espacial”, dijo a Mic el capitán de la Fuerza Aérea Nicholas J. Mercurio, director de asuntos públicos del JSpOC. Es una "sofisticada arquitectura de sensores de radares electroópticos terrestres y espaciales que nos permiten hacer un seguimiento de más de 23 mil objetos en el espacio todos los días". Una vez que los objetos son identificados con la claridad suficiente, los investigadores publican los datos en línea.
"Somos conscientes del objeto en cuestión, pero debido a su inclinación y la órbita, el JSpOC no dispone de datos suficientes de detección de los sensores para clasificar el objeto para su inclusión en el catálogo del espacio", añadió Mercurio. "Sin la capacidad para detectar con precisión el objeto en este momento, no podemos confirmar lo que es o realizar una predicción de su reinserción en la atmósfera terrestre".
De los 23 mil objetos artificiales (lanzados por la NASA) que orbitan alrededor de la Tierra, sólo mil 300 son útiles y están activos, dijo Mercurio, lo que significa que todavía tienen alimentación y están en uso (como una nave espacial o un satélite, por ejemplo). Mercurio tomó nota de la red de vigilancia que está "tomando más de 400 mil observaciones diarias", lo que resulta en un promedio de 23 alertas por día. En 2014, los satélites se movieron 121 veces para evitar colisiones, utilizando estos datos.
Como en un famoso episodio de Los Simpsons, los científicos planean que este objeto se desintegre en el proceso de reinserción a la Tierra. Esperemos que, como Homero, la ciencia tenga razón.