El sitio Drug Abuse ha creado una gráfica en la que supuestamente se reflejan las drogas más usadas en algunos de los festivales de músicas más populares del mundo, entre ellos, parte de la escena ya post rave: Glastonbury, Burning Man y Coachella. Aprendemos que Burning Man es el más psicodélico de los festivales mostrados (Boom, en Portugal, podría superarlo), dominando en drogas como DMT, hongos o LSD. Coachella es el más fresa, pijo, posh o cheto, y domina la cocaína. El MDMA es un mundo aparte, más ligado al dance, con el Electric Daisy en primer lugar. Por supuesto, el Marley Fest es donde más se atiza. Como dato extra, el KISS Country Chili Cook fue el que más menciones de alcohol tuvo.
La metodología de la gráfica, si bien parece reflejar cierta lógica, es bastante cuestionable. Está basada en #hashtags de Instagram (aunque utilizando más de 3 millones de posts de análisis para detectar los festivales y, de ahí, fijándose en las sustancias). Más allá de la cuestionable data de esta gráfica no hay duda de que es muy interesante, sobre todo para aquellos que buscan ambientes favorables para drogarse o simplemente quieren etiquetar de botepronto a las personas que van a un festival.
Con el reciente fervor de festivales brandeados en México, ¿podemos especular cuáles son las drogas más populares del Corona Capital o del Vive Latino? La cocaína, los Red Bulls y los vodkas, tal vez, además de las cerveza. ¿Ceremonia y Bahidorá? Los chocolates de hongos, el MDMA y la cocaína omnipresente debajo del agua. ¿Ometeotl? Los ácidos, seguramente... ¿Cómo ven? ¿Hay festivales sin drogas? ¿No somos capaces de divertirnos a tope sin estupefacientes?