La tecnología es quizá hoy el mayor pulso de energía social y cultural que existe. Es decir, es a partir de este campo de donde emergen las principales pautas de comportamiento que hoy se registran y modelan la realidad contemporánea. Pero además, la tecnología ha permeado ya otros campos, como el misticismo (con nociones como el tecnochamanismo o dispositivos para simular desdoblamientos astrales) y la biología (con la impresión de órganos en 3D y otros).
Históricamente el hombre ha soñado con potenciar su propio diseño. Una porción considerable de la ciencia está directa o indirectamente orientada a esto. Desde extender la vida hasta revolucionar la capacidad cognitiva esta persecución para, aparentemente, acelerar la evolución hasta el punto de acercarnos a aquellas figuras superheróicas, ha sido una inquietud casi permanente en el ser humano.
Los dos fenómenos anteriores, el culto cotidiano a la tecnología y la búsqueda de la "superheroización", convergen en el transhumanismo (especie de doctrina que ve en la tecnología y en nuestra fusión literal con ella el máximo motor hacia el bienestar futuro de la humanidad) y en particular en el diseño de hacks puntuales, vía el desarrollo tecnológico, que permitan maximizar las funciones humanas. En pocas palabras se trata de una utopía biológica que nos acercaría a una especie de estado de tecnogracia (y tecnocracia).
A continuación describiremos 4 de estos hacks, compilados por el sitio Ultraculture, que ilustran a la perfección esta búsqueda, su naturaleza polémica y, aún más apasionante, su virtual accesibilidad (pues se trata de implementaciones que ya están disponibles, o al menos son confirmadamente asequibles).
Telepatía electrónica
Manipular el sistema nervioso vía electrotransmisores neurales es una pequeña pero prometedora área del desarrollo científico. Por ejemplo, investigadores de la Universidad Brown desarrollaron dispositivos que podrían derivar en la interconexión de sistemas nerviosos y crear así redes telepáticas. Algo como un paso más allá del "internet de las cosas": el "internet de los seres".
Visión nocturna
La clorina e6, una molécula natural que contienen los peces de agua profunda, se utilizó para habilitar la vista en ambientes oscuros. Si bien esta sustancia se ha utilizado vía intravenosa para tratamientos de cáncer, jamás se habían probado sus bondades como facilitador de visión nocturna. El resultado de este exótico experimento fue bastante alentador ya que el voluntario logró ver con claridad, en plena oscuridad y hasta a una distancia de 50m, durante unas horas.
Magnetismo subdermal
Una práctica relativamente común en el ciberfashion y el biohacking es el implante de pequeños imanes recubiertos de materiales que impiden que sean naturalmente rechazados por el organismo. Esto permite, además de por ejemplo tomar un instrumento ligero de metal (pero sin tomarlo), desarrollar una acrecentada sensibilidad para detectar campos electromagnéticos.
Cristales de oxígeno
El año pasado, científicos daneses descubrieron una sustancia cristalina que absorbe y almacena cantidades considerables de oxígeno. Al aplicarse calor a los cristales estos liberan, controladamente, el oxígeno retenido. Este material, derivado del cobalto, podría proveer de oxígeno en entornos como el subacuático o el espacio exterior.