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El 2015 empieza con la mejor pirotecnica, aquella de las flores del cielo: los cometas. Este año podremos ver desde el 1 de enero un cometa con el ojo desnudo, el cual cobrará brillo paulatinamente durante la primera semana del mes .
Se trata del cometa C/2014 Q2, el quinto cometa descubierto por el astrónomo amateur Terry Lovejoy. El punto de mayor magnitud del cometa ocurrirá el 7 de enero, cuando pase a 70 millones de km de la Tierra, lo cual lo hará fácil de detectar en los cielos nocturnos, como un bólido de fuego verde rozando la constelación de Orión hacia Tauro y las Pléyades, creando divinas sizigias a su paso en dirección norte.
Este cometa que se caracteriza, como la mayoría de los cometas, por una luz verde en su testa, en realidad tiene ya una magnitud superior a 4; sin embargo, debido al brillo de la Luna, se necesitan binoculares para observarlo estos días. A partir del 7 de enero, cuando tengamos noches sin luna, se podrá apreciar sin la ayuda de herramientas telescópicas de ningún tipo. El cometa se mantendrá en el firmamento todo el mes.
El color verde de su cabeza viene de las moléculas de C2 fluorescentes en la luz ultravioleta en el vacío sideral. En la antigüedad los cometas eran celebrados como los heraldos de nuevos tiempos, como grandes semillas-espermas cósmicos que daban luz a una nueva inflexión en la historia.