¿Es el liberalismo sólo otra forma del conservadurismo? Eso, al parecer, es lo que cada vez con más empeño intenta demostrar la sociedad estadounidense y sus instituciones públicas. A pesar de que simbólica o ideológicamente se le considera el país de las libertades, es posible que eso sólo sea una fachada que oculta una realidad cimentada en la represión y la intolerancia.
Prueba de ello es este episodio protagonizado por un adolescente de Everett, Pennsylvania, que ante la estatua de un Cristo arrodillado, colocada en la vía pública por la organización religiosa Love in the Name of Christ, tuvo la ocurrencia de simular una escena de sexo oral, fotografiarse y subir las imágenes a Facebook.
Eso último, sin embargo, fue su error, pues las autoridades policíacas locales miraron las imágenes y de inmediato procedieron a buscarlo, invocando una ley de 1972 que sanciona “desfigurar, dañar, contaminar u otra forma de maltrato físico de manera tal que el sujeto sepa que lastimará la sensibilidad de personas que observen o descubran su acción”. Por esta norma, el joven podría pasar hasta dos años en la cárcel.
El incidente despierta varias preguntas. ¿Es legal que la policía espíe en Facebook la conducta de un ciudadano? ¿El hecho hubiera pasado desapercibido si el sujeto de la estatua fuera otro? ¿Por qué esa misma ley no puede utilizarse en sentido inverso y argumentar que una efigie de Jesús lastima la sensibilidad de una persona?