No es casual el aspecto teatral y críptico de estas imágenes. Barry Underwood tiene antecedentes en el teatro, la historia del arte y la ecología. Ha podido pasar varias estancias artísticas en distintas latitudes, donde ha encontrado muchos de los paisajes que lo han poseído y que luego ha intervenido.
Cada locación provee un escenario en el cual representar historias sobre “lo sublime de la naturaleza, el poder de la humanidad sobre la naturaleza, y el poder de la naturaleza sobre los humanos”. Cada lugar y cada clima es distinto; son evocaciones de algo en el interior de nuestra psique que es sutilmente delineado con luz por Underwood.
Desde 2002 empezó a bosquejar las ideas de lo que hoy es Scenes, una exposición que se exhibe actualmente en la Sous Les Etoiles Gallery de Nueva York.
Las imágenes empezaron como bocetos; unas veces el escenario generaba una idea, otras era la idea la que incitaba a buscar un paisaje determinado. Entonces Underwood creaba sus instalaciones usando luces LED u otros métodos de iluminación, para luego tomar fotografías con largas exposiciones (entre 15 minutos y 6 horas). Este es su momento favorito, un tiempo de tranquilidad en el que se sentaba a contemplar la escena y quizá tomar una siesta.
Las imágenes son controladas, pero le gusta cuando algún elemento desconocido entra en escena: las luces de un auto que pasa o una fogata en la distancia; le gusta notar, cuando ve el resultado final, que el viento soplaba y entonces el pasto aparece con una textura borrosa y suave.
Estas fotografías buscan evocar, comunicar; cada elemento está allí por algo, como un mensaje humano que se vuelve onírico al ser traducido al enigmático lenguaje de la naturaleza.