Pero tal vez lo más increíble sea que la señora Thompson está terminando un tratamiento contra el cáncer. El de San Diego fue su quinceavo maratón, y afirmó en entrevista que "si estoy aquí el año entrante, pienso que probablemente podré entrenar mejor y estar en mejor forma."
A pesar del inclemente calor y de las quemaduras de quimioterapia en sus piernas, Thompson se mostró optimista (¿será eso, además del ejercicio físico y la alimentación, la clave de la longevidad?): "Si puedo, lo intentaré otra vez."