El análisis automático de sentimientos es un campo que está cobrando relevancia para organizar la inmensa cantidad de data que aportan redes sociales como Twitter, donde algunos analistas pueden deducir ciertos patrones emocionales (también llamados "temperatura emocional") a partir de la densidad y repetición de ciertas emociones básicas.
Se trata de un ejercicio que se basa en atribuir un valor arbitrario a ocho emociones básicas: enojo, alegría, miedo, repugnancia, tristeza, sorpresa y confianza; a partir de bases de datos asociadas a estas emociones, el algoritmo extrae un valor emocional que puede presentarse en outputs visuales o sonoros, como aseguran Hannah Davis de la Universidad de Nueva York y su colega Saif Mohammad del National Research Council Canada, quienes han aplicado el mismo principio para medir la temperatura emocional de algunas obras maestras de la literatura universal.
Los investigadores llamaron a su algoritmo TransProse, y afirman que será una opción muy importante para visualizar información en el futuro de los e-books, por ejemplo, para servir como musicalización de ciertos pasajes y proveer de contexto en el caso de audiolibros.
Las premisas son muy básicas y pueden parecer, de hecho, un poco reduccionistas: primero se divide el libro en cuatro partes (principio, primera mitad, segunda mitad y final, no importa qué elegante estructura haya querido darle el autor), y se genera un perfil emocional de cada sección. Esto es simplemente una manera inteligente de usar estadística. Luego (y aquí viene la parte que puede generar escepticismo), el algoritmo genera música a partir de esas emociones.
El algoritmo cuenta con información sobre tempo, clave mayor o menor (convenientemente, sólo para la escala de Do) y está reducido a un simple sonido de piano en midi, aunque la alternancia de varias melodías puede generar una textura sonora que es divertido comparar con la idea que uno tiene de ciertos libros.
El proceso parece fascinante, pero los resultados son altamente subjetivos, así que más vale que busques entre los libros que han "musicalizado" para hacerte de tu propia opinión. Los libros incluyen Naranja mecánica, El corazón de las tinieblas, Peter Pan y Alicia en el País de las Maravillas. Las piezas finales pueden escucharse aquí.