A lo largo de la historia los arquitectos han tomado formas de la naturaleza para reproducirlas e imitarlas en los espacios privados o públicos dentro de las ciudades. Para esto, la geometría es una herramienta indispensable, sin lo cual su trabajo sería imposible. Sin embargo, la geometría clásica no es la única rama de las matemáticas que puede ser aplicada a la arquitectura.
Los fractales son una forma geométrica que se itera o reproduce a sí misma, volviéndose autorreferencial a distintas escalas. La manipulación de una figura fractal produce resultados visualmente sorprendentes y conceptualmente retadores.
Desde teorías topológicas extremas hasta investigación de materiales impresos en 3D, estos edificios proponen nuevas formas de percibir y diseñar el espacio, además de ser exponentes de un periodo distópico en apariencia y emocionante en cuanto a la producción de nuevas formas y percepciones del espacio: la realidad es la que habitan nuestros sentidos.
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