La creación de contenidos en la web se ha diversificado y masificado: así como en Wikipedia cualquiera puede aportar contenidos, han surgido espacios que buscan vivificar el valor de las historias personales íntimas, de los miles de personas que somos. Así nace Güiquimí, una plataforma que crea un archivo digital de millones de historias individuales generadas por los mismos usuarios: desde podcasts, videos, animaciones, escrituras, imágenes, etc.
Todos tenemos algo qué contar sobre nosotros, y contarlo seguramente tiene valor; así, en conjunto, todo eso que tenemos que decir genera finalmente un nosotros, una identidad colectiva en una especie de reconocimiento a lo propio: lo que crees, lo que no crees, lo que te desespera, lo que sueñas, lo que quieres, etc. Incluso se vale la confusión, lo que creías que no es, y ya no sabes que sí es.
Güiquimí es un archivo de todos, algo habrás de encontrar ahí que te resuene, o tal vez nada, pero se trata de provocar una reflexión sobre las implicaciones de crear y consumir contenido, pero sobre todo de valorar lo íntimo, que en totalidad nos hace ser lo que somos como sociedades.
Güiquimí ofrece una plataforma que busca provocar una reflexión consciente sobre las implicaciones de ser productores y consumidores de información en la red. A través de diferentes medios como video, audio, imagen y texto, cada participación se va sumando para construir un archivo de experiencias compartidas. Para participar lo único que tienes qué hacer es registrarte en http://www.guiquimi.org.mx.
Si te interesan las conclusiones o “desconclusiones” a las que hasta hoy ha llegado el equipo involucrado en la creación de este proyecto, acude al Centro de Cultura Digital de la Ciudad de México este 14 de diciembre a las 18:00 horas, en donde se expondrán las reflexiones sobre las implicaciones de la creación de contenidos digitales, como parte del Primer Festival Luces de Invierno. Quizá saber quién eres tiene que ver con la percepción que tienes sobre quiénes son los otros.
Asimismo, quizá también la gran cantidad de contenido producido para la web aún no ha sido dimensionado en sus efectos. ¿Cómo ha cambiado esto nuestras vidas o nuestra psique? Las preguntas son muchas y apenas inicia el camino de la aventura digital, que crecerá sin duda dentro de cualquier escenario futuro.
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