En este mapa, elaborado originalmente por el periódico The Washington Post, se muestra la distribución mundial de la depresión según la cantidad de personas que reciben este diagnóstico, esto a partir de datos recabados en una investigación publicada en la revista PLOS Medicine.
Así, el país con más personas deprimidas en el mundo es Afganistán, mientras que el que menos personas tiene es Japón, dos extremos que quizá sorprendan si, como sabemos, existe cierto lugar común que atribuye una tristeza profundamente enraizada a las naciones boreales de la península escandinava y, por otra parte, se cree que solo los países tropicales son congénitamente felices.
En el caso de este estudio se destaca la relación entre conflictos sociales y depresión: en países del norte de África o Medio Oriente, por ejemplo, los niveles de depresión son altos, en tanto que el caso opuesto, aquellos en los que la depresión es más bien menor, esto se atribuye a la estabilidad y bonanza económicas (por ejemplo, en los países asiáticos de la zona del Pacífico).
También cabe resaltar que el estudio toma en cuenta información de los sistemas de salud públicos de cada país, por lo que en algunos casos ésta puede ser imprecisa o insuficiente. De Irak, por ejemplo, los investigadores piensan que los índices de depresión podrían ser mayores, solo que los servicios de salud del país no permiten saberlo con certeza.
Por último se tiene este diagrama que sintetiza la información de la depresión según edad y género, en donde se observa que ésta se diagnostica con mayor frecuencia entre mujeres y en un rango de edad de entre 20 y 29 años.
En suma, se presenta un atisbo al estado de ánimo que quizá tenga el mundo en este momento.