Es probable que hayan visto un vídeo de ferrofluidos haciendo cosas increíbles como cambiar de forma al ser expuestos a imanes, o en instalaciones de arte interactivas, pero ahora los científicos creen que los ferrofluidos pueden ser más que una experiencia visual y artística, pueden ser modelos del multiverso.
Investigadores de la Universidad de Maryland y la Universidad de Towson han sugerido estudiar los ferrofluidos para entender cómo se forman los multiversos. Esto se dio después de que los científicos mostraron interés en usar los metamateriales para crear modelos de comportamiento físico. Los metamateriales son materiales hechos por humanos que demuestran características que no se observan en materiales naturales, pero que coinciden con comportamientos estrambóticos del universo físico. De hecho, algunos científicos creen que si aplicara un campo magnético a un vacío en el espacio, este se comportaría como un metamaterial.
Los científicos se enfocaron principalmente hacia los ferrofluidos, que son fluidos con filamentos de metal suspendidos. Cuando se les aplica un campo magnético, crean estructuras solidas complejas. Como tal, no son metamateriales, pero bajo ciertas influencias forman pequeñas columnas y grupos de alambres que se comportan como metamateriales, y forman metamateriales hiperbólicos.
Los metamateriales hiperbólicos juegan con la luz; de manera que luz que lleva una dirección interactúa con el material como si este fuera un metal, mientras que luz que viaja en otra dirección se comporta como si el material fuera vidrio transparente. Los investigadores mantienen los ferrofluidos hasta el punto antes de que se conviertan en un metamaterial hiperbólico, y dejan que fluctuaciones térmicas al azar en el ferrofluido lo conduzcan para que brevemente y espontáneamente, cree bolsas de metamaterial hiperbólico.
Los científicos creen que estudiar el material y sus fluctuaciones pueden enseñarnos acerca de los pequeños multiversos que aparecen y desaparecen en el universo. La manera en que la luz se mueve a través de este material es análogo a la manera en que las personas comprenden el espacio de Minkowski, un espacio de cuatro dimensiones, con tres dimensiones físicas y una dimensión extra del tiempo. Desafortunadamente, los humanos no pueden ver el tiempo como una dimensión física. Las bolsas de metamaterial hiperbólico del ferrofluido podrían ser interpretadas como el espacio de Minkowski en dos dimensiones, con la tercera dimensión siendo el tiempo, esto si pueden verlo los humanos y aunque no sea una copia exacta del espacio de Minkowski, es un buen modelo.
Estudiar las fluctuaciones termales de los ferrofluidos podrían darnos una imagen bastante clara del funcionamiento, aparición y creación de multiversos espontáneos en el espacio de cuatro dimensiones.