No es fácil ser el hombre con el pene más grande del mundo, especialmente cuando se trata de atravesar los molestos puestos de seguridad en los aeropuertos. Jonah Falcon, aunque logra mantener el sentido del humor, es víctima de la paranoia anti-terrorista y/o la fascinación por el falo (el falocentrismo de nuestra cultura).
Falcon recientemente tuvo que vivir un cómico y a la vez ofensivo episodio en el aeropuerto de San Francisco, donde recibió un cateo especial, después de que las autoridades sospecharon que llevaba un paquete oculto en sus pantalones. Pero no, este hombre de 41 años, no llevaba un arma o drogas, sino, para el asombro de uno de los guardias, simplemente llevaba adherido a su lado izquierdo su pene de más de 9 pulgadas flácido y más de 13 erecto (lo que constituye un récord, según un documental de HBO ).
Uno de los oficiales le preguntó si llevaba algo en la bolsa, a lo que Falcon respondió que "no", pero entonces las cosas se pusieron más serias y lo llevaron al escáner de cuerpo completo.
"Otro guardia me detuvo y me pregunto si tenía algún tipo de excrecencia", dice Falcon.
Al parecer su miembro estaba generando algún tipo de creciente magnetismo, porque otro guardia, más joven, interpretó su "paquete" como una amenaza biológica. "Le dije 'es mi pene'. Me cateó pero se aseguró de rodearlo con las manos. Luego me pusieron polvo, probablemente para examinar si tenía explosvos. Fue divertido" dijo Falcon, quien ha rechazado a la industria del porno, pese a estar desempleado.
Falcon, dijo en una entrevista al Huffington Post, que para la próxima vez usará mallones de motociclista para que las autoridades no confundan su pene con armas de destrucción masiva. Ya que este sólo es una "masiva arma de concepción", juega Faclon.