En las matemáticas no son pocos los casos en que ciertos individuos idean problemas que ni ellos ni las generaciones posteriores pueden resolver. Así, por poner el ejemplo más sintético, con los llamados “Problemas del Milenio”, 6 de 7 rompecabezas matemáticos que todavía ahora siguen sin solución.
Y sin embargo sucede, parafraseando a Galileo. Nace y se forma una persona capaz de resolver lo que cientos no pudieron en épocas pasadas, lo cual es todavía más sorprendente (o no) cuando este paladín de los números, las fórmulas y pensamiento complejo es admirablemente joven.
Este es el caso de Shouryya Ray, un joven de 16 años y de origen indio que, estudiando en Alemania, resolvió un problema matemático con 350 años de antigüedad legado nada menos que por Sir Isaac Newton.
Luego de escuchar de sus maestros en Dresden que la teoría de dos partículas dinámicas de Newton no tenía solución, Shouryya crackeó el planteamiento e hizo posible calcular el vuelo de un objeto arrojado y predecir cómo este impacta y rebota contra una superficie.
“Simplemente me pregunté, ‘¿Por qué no?’ No podía creer que eso no pudiera ser la solución”, declaró el joven estudiante a la prensa alemana.
Subhashis Ray, padre de Shouryya, es asistente de investigación en la Universidad Técnica de Friburgo y enseñó calculó integral y diferencial a su hijo cuando este contaba ya con 6 años.