Luego de que en años recientes se popularizara el mundo de la magia, las brujas y los vampiros, con libros, películas y series televisivas que tocan estos temas –por ejemplo Charmed, Harry Potter, o True Blood, no debería de sorprendernos que hoy salte a la fama un trío de tres jóvenes exorcistas. Sin embargo, no por ello deja de ser poco usual el estar publicando una nota sobre este fenómeno que ha surgido en Phoenix, Arizona.
Brynne, Tess y Savannah son tres adolescentes 'comunes', solo que cuando no están de compras en el centro comercial, navegando por Internet, o asistiendo a sus clases de canto, ellas se dedican a ahuyentar demonios que se hayan posado sobre personas. Y al parecer, ademas de que cada una tiene su propio rol una vez que inicia la interacción contra los demonios, parece que estas jóvenes tienen plena confianza en lo que hacen, tal como lo demuestran las palabras de Brynne:
Brynne es hija del Reverendo Bob Larson, quien ha realizado más de diez mil exorcismos, muchos de los cuales incluso están documentados en YouTube –aunque no por eso dejan de generar escepticismo.
Y aunque la fama de este juvenil trío lo ha llevado incluso a aparecer con el popular periodista de ABC News, Anderson Cooper, lo cierto es que aún son ridiculizadas, o al menos descalificadas, por muchas personas. Cabe destacar que el principal argumento de los no creyentes es que el estar poseído en realidad se trata de un estado mental que ha sido auto-impuesto por diversas circunstancias, y destacan el hecho de quejamás se ha reportado el caso de un ateo poseído por un demonio.
Pero tal vez la interrogante más divertida es si estamos frente a una nueva generación de adolescentes que, influídos por la cultura pop, comenzarán a asumir roles épico-metafísicos, lo cual sin duda resulta una simpática extravagancia. Claro que por su apariencia, tampoco podríamos descartar que el llamado "Escuadrón de Dios" se trate en realidad de una activación de marketing para promover alguna serie televisiva de una gran cadena estadounidense. Tal vez.