Generalmente pensamos que somos los humanos mayormente los que navegamos Internet y visitamos sus diferentes sitios, pero la Red en realidad es dominada por bots, programas informáticos, malware y arañas que indexan.
Un estudio realizado por la compañía de seguridad web Incapsula muestra que el 51% del tráfico proviene de fuentes no humanas; el 20% de este tráfico no humano es benigno y el 31% maligno potencialmente. El 49% del tráfico total corresponde a fuentes humanas.
El 20% del tráfico proviene de motores de búsqueda haciendo lo que se conoce como "crawling"; 19% del tráfico en Internet es el resultado de "espías" (softwares) recolectando datos de inteligencia (minando); el 5% es el resultado de herramientas de hacking automatizadas; el 5% scraping (extracción de datos) y el 2% por spam automatizado.
Aunque no lo notemos mucho, el ciberespacio es un terreno que cada vez es más ocupado por bots que sutilmente están vigilándonos, midiendo nuestros patrones de navegación o realizando ataques orquestados. La información es ya la moneda global.