En una versión pop posmoderna de la historia en la que el príncipe se convierte en el mayordomo (en un aeromozo travesti), el multimillonario Richard Branson tendrá que depilarse las piernas, vestirse de mujer y atender al ganador de una subasta (o perdedor ya que pagará 650 mil dólares) durante un vuelo de Air Asia de Londres a Kuala Lumpur.
El fundador de Virgin Atlantic le dará el rastrillo a uno los 160 pasajeros de este vuelo altruista y se someterá a la navaja.
Branson y el fundador de Air Asia, Tony Fernandes, apostaron con sus nuevos equipos de Formula 1 quién llegaría antes en el campeonato de constructores, prometiendo que el perdedor serviría como sobrecargo en la aerolínea del otro. El equipo de carreras de Fernandes superó al de Branson y los dos playboys y puériles millonarios ahora están por presenciar el desenlace de su apuesta.
“Como un aeromozo de Air Asia, Richard tiene que someteres a nuestros estandares de presentación, lo que incluye rasursarse la piernas”, dijo Fernandes y añadió que Branson deberá usar tacones y maquillaje.
El vuelo en cuestión contará con magos y bandas en vivo, y costará 7300 dólares por persona.