En una alusión bastante estética al arquetipo de la prisión, un fotógrafo asutraliano captó en Noosaville, Queensland, la imagen de una hormiga atrapada en una esfera, casi perfecta, de agua. El autor de la fotografía, Adam Gormley, habla sobre la espontánea fortuna que tuvo e poder captar la escena: "Estaba usando una cámara especial para tomar close ups y buscaba arañas en el jardín. No estaba teniendo mucha suerte a causa de una fuerte lluvia y entonces fue cuando decidí ponerme a retratar pequeñas gotas de lluvia reposando en las hojas de diversas plantas". Pero lo más curioso es que al momento de fotografiar a la hormiga atrapada Gomley pensó que se trataba de un poco de tierra dentro de una gota que permanecía inmóvil sobre una hoja de Aloe Vera, y no fue hasta que descargó las imágenes en su computadora que notó que en realidad de trataba de una hormiga y agradeció la poética imagen que tuvo la suerte de conseguir.