Kathleen Harrison, la esposa del fallecido estrella de la psicodelia Terence Mckenna, habla sobre su primera vez fumando la "molécula del espíritu", antes de entrar a un concierto de harpiscorido en un porro de marihuana con DMT. Harrison relata también como fue iniciada a la "substancia pura", por el gran iniciador de la cultura psicodélica triptamínica, Terence Mckenna, quien después se convertiría en su esposo.
Harrison cree que el hecho de que el DMT y las triptaminas existan en tantas especies (son los psicodélicos más potentes y abundantes en la naturaleza) hace pensar que estas moléculas tienen proporcionan una ventaja evolutiva y que su presencia en las plantas y en los humanos es una especie de portal a los otros mundos que están dentro de este, ventanas también a entender la percepción extrasensorial y los eventos de renacimiento que forman parte del misterio de la vida.