Justo antes de dejar su puesto, la secretaria del Consejo Sobre el Mal Uso de las Drogas, Jacqui Smith, dejo instrucción a su oficina de analizar esta cuestión, luego de que el problema fuera señalado en un estudio del Academy of Medical Sciences. La dependencia estaría investigando los efectos secundarios y posibles adicciones que propician estas sustancias.
Una de las cuestiones a tomar en cuenta es la perspectiva de que los nootrópicos son una especie de doping (esteroides para el cerebro), como en los deportes, dentro del mundo laboral y académico. Además, se considera la posibilidad de que se genere una sobrecompetencia en condiciones desfavorables: ya que estas sutancias pueden ser muy caras y empleadores podrían obligar a sus trabajadores a consumirlas para mejorar su rendimiento.
Más allá de que estas cuestions deben de debatirse: ¿qué tan justo es que la persona con la cual compitó por un trabajo tome nootrópicos? es rídiculo añadir más sustancia a la lista negra, limitando a la misma inteligenica y a la voluntad su capacidad de decidir. Después de todo, el mundo entero es una droga, la televisión, las música, las personas, y no vemos que alguien en Occidente prohiba escuchar teen pop o ver un reality show.
Los nootrópicos más utilizados actualmente son el modafinil (Provigil), los racetams (como el piracetam), algunas anfetaminas (como la ritalina y el adderall) la hidergina, etc.; entre los más nuevos, caros y prometedores, está la familia de los ampakines. Existen evidentemente varios otros nootrópicos de origen natural como la galantamina o el gingko biloba. Hicimos una extensa reseña de varias de estas sustancias, la cual puede ser consultada aqui.