Al morir sólo una cosa es segura: nuestra información permanece. Según el escritor Don Delillo cuando morimos nos convertimos en nuestro perfil de Internet. Pero es un poco deprimente que seas inmortal a través de Facebook o peor Hi5. (Si fueras un espíritu hábil seguramente lo hackearías desde otra dimensión para dar descanso a tu vida digital). Otra opción más interesante para tu imperecedera personalidad es Mission Eternity: un culto a la muerte alimentado por la tecnología informática.
Mission Eternity es a la vez un proyecto de arte presentado en el festival Ars Electronica, como un modo de supervivencia metafísica. La información es nuestro espíritu.
"Lo que sabemos es que los humanos muertos siguen existiendo como biomasa y rastros de memoria global, en servicios en línea, en archivos del gobierno, en redes sociales, en data emocional alamacenada como impulsos eléctricos de amigos y familiares...", dice la voz plácida y robótica de Mission Eternity.
La idea de Mission Eternity es que nuestra muerte sea una obra de arte y de esta forma trascienda el olvido hacia una cuasieternidad digital. Esto es posible a través de cápsulas Arcanum que contienen fragmentos digitales de la vida de un Piloto, mapas de sus redes sociales, mensajes postmortem al mundo, contenido dinámico cuidadosamente curado para tomar su propia vida en el futuro e interconectarse con otras cápsulas digitales para dialogar eternamente en la frialdad del espacio a través de lifebits. Nuestros datos estarán juntos para siempre.
Los pilotos son personas que buscan la eternidad de la información y donan algunos de sus datos para que artistas, diseñadores, abogados, hackers, etc, trabajen en sus sarcófagos digitales, creando una obra digna de cruzar el río del ciberchacal Anubis, y llegar a Akasha. Dentro de la tumba física del Piloto se coloca una M-Tag, la cual tiene 16 dígitos alfanuméricos y un código de barras que puede ser escanedado con una cámar o un teléfono y automáticamente liga a este aparato móvil o computadora a un PORTAL DE EVOCACIÓN, en el que el visitante puede interactuar con la información del piloto.
Para asegurar la permanencia de la información se requieren de Ángeles que donen espacio en su memoria. Cada cápsula está cuidada por varios ángeles, en diferentes redes, en el caso de que estos ángeles fallen, la cápsula está programada paar emitir por sí sola una alerta solicitando espacio mnemónico. En el sitio de Mission Eternity puedes convertirte en un ángel digital.
Mission Eternity creará M∞ BRIDGES, puentes que emiten data visual proveniente de las cápsulas en formas artísticas. Algunos de estos puentes se transmitirán vía bluetooth y señales de radio creando una nueva forma de arte interactivo. Ruido blanco desde la eternidad digital...
Y depués de todo, siempre es posible que en el futuro te puedan regresar al mundo sólo combinando tu información y descargándola sobre un cuerpo diseñado para acomodar los bits de tu espíritu.
Mission Eternity: Crossing the Deadline