La máquina funciona introduciendo el papel de oficina, hojas impresas por los dos lados según el eco-canon, en una rendija que las hace trizas, las cuales, después de una rara alquimia maquinal, son ensambladas en un rollo de papel de baño de manera automática. 40 hojas y media hora después de introducir el papel, el usuario tiene un rollo de papel de baño (así que tal vez la máquina no sirva para salvar una emergencia en la cual esperar 30 minutos para ir al baño (sin papel ortodoxo) sería insufrible, pero si funciona para la calculada expulsión de los desechos en un espejo de la alquimia a la cual se prepara el oficinista).
Por otra parte la maquina provee un placer secreto al permitir a su usuario limpiarse con sus texto preferidos convertidos en papel de baño: algun fetichista podrá usar una versión higienica del "Matrimonio del Cielo y el Infierno", un tratado de escatología new age, o tal vez una irreproducible diatriba con el nombre de su jefe.
La máquina cuesta 100 mil dólares, por lo cual, si se toma el promedio del precio de un rollo de papel de baño en 60 centavos de dólar, se tendrían que producir casi 200 mil rollos de papel de baño para empezar a ganar con Cabra Blanca.
Más allá de si esto sea o no rentable, celebramos la existencia de Cabra Blanca con trasmontana efusión y recomendamos a cualquier complejo oficinista que participe en este placentero reciclaje... por alguna razón de esta forma ir al baño será mejor.