En realidad el ilusionista Mulholland había sido reclutado por Sidney Glottieb, director del infame proyecto de control mental de la CIA, MK ULTRA, quien estaba consciente de que grandes potencias habían usado a famosos magos para sus operaciones secretas, como Robert Houdini y Jasper Maskelyne.
Estos hechos han sido revelados en el recientemente declasificado The Official CIA Manual of Trickery and Deception.
En la introducción, Mulholland escribe "El propósito de este documento es instruir al lector para que aprenda a realizar una variedad de actos secretos e indetectables. En resumen, se trata de unas instrucciones para el engaño".
Algunos de los apartados del libro se dividían en “trucos con pastillas”, “trucos con líquidos” o “trucos con pequeños objetos”. Básicamente Mulholland les enseñaba a los agentes a drogar a alguien sin que éste se diera cuenta, algo que la CIA hizo con el LSD en el proyecto MK ULTRA sin obtener los resultados deseados. Otros de los trucos tenían que ver con comunicarse en secreto o cómo intercambiar un paquete sin llamar la atención.
Mulholland recomendaba el disimulo del intelecto: “Una mirada demasiado alerta puede infundir sospechas en la mente del observador. Parecer un poco tonto puede ser la mejor arma del impostor”.
Buena parte de los trucos o ilusiones de Mulholland son anacrónicos, ya que dependían de que las personas tuvieran cerillos o usaran gabardina y, en general, de los protocolos sociales de la época. Hoy en día habría que adaptarlos a los dispositivos móviles y a otros elementos, aunque seguramente la Agencia tiene un nuevo ilusionista.
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