La depresión en algunos casos permea todo los ámbitos de la existencia de una persona, incluyendo el lenguaje que usa. Un nuevo estudio publicado en Clinical Psychological Science sugiere que las personas deprimidas usan más cierto tipo de palabras y que incluso se puede hacer un análisis lingüístico para predecir si un individuo está deprimido.
No es sorpresa que las personas deprimidas utilicen más palabras que describen emociones negativas, como pueden ser "soledad", "tristeza" "miseria". Lo notable es su uso de pronombres en primera persona como "yo", "mío", "mí" y significativamente menos pronombres en segunda o tercera persona como "ellos", "ustedes" "ella", etcétera.
Los investigadores creen que esto indica que los individuos deprimidos están enfocados en sí mismos, incluso ensimismados u obsesionados con su propio pensamiento y condición, y por lo tanto, menos conectados con los demás. Estos pronombres, de hecho, son más precisos para predecir la depresión de una persona que las palabras que señalan emociones negativas. Existen estudios que correlacionan el rumiar, los pensamientos obsesivos o en círculos, generalmente sobre los propios problemas, con la depresión. Sin embargo, no se sabe del todo si la depresión causa que las personas se enfoquen en sí mismas o si quienes se enfocan en sí mismos se deprimen por esto.
Aún más preciso para predecir la depresión que los pronombres, según la investigación, es el uso de palabras de carácter absoluto como "siempre", "nada"" "totalmente"; las personas deprimidas usan más estas palabras, que indican una visión blanco o negro del mundo.