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Un enorme problema en las granjas de Dinamarca y para la crisis sanitaria actual por la covid-19

Este miércoles se anunció en Dinamarca que las granjas de visones en este país deberán llevar a cabo un sacrificio masivo de dichos animales, esto con el fin de detener la transmisión de una cepa de coronavirus que se ha estado esparciendo entre ellos. La mutación ya se ha encontrado entre doce humanos en la parte norte del país y, de continuar los contagios, podría anularse la efectividad de la vacuna contra la covid-19 que se ha desarrollado en los últimos meses.

Las autoridades sanitarias danesas consideran que el problema es sumamente serio, hasta el punto de que no han titubeado en decretar la muerte de entre quince y diecisiete millones de visones, animales que sustentan la industria de pieles del país, la cual constituye a su vez cerca del 40% del total mundial. Estos animales, llamados minks en inglés, son la materia prima de los famosos abrigos de mink, la mayoría de los cuales son exportados actualmente a China.

La mutación del virus es algo normal y no significa que provoque síntomas diferentes en los humanos contagiados, pero al parecer sí tiene un posible efecto importante en tanto que puede debilitar la eficacia de los anticuerpos humanos, lo cual podría a su vez afectar la efectividad de una vacuna contra el nuevo coronavirus. En otras palabras, con una mutación del virus de por medio, los anticuerpos humanos podrían ser menos eficaces.

El gobierno danés ha afirmado la necesidad de acción expedita y el temor de que esto pueda convertirse en un problema de salud mundial. Actualmente ya más de 1.5 millones de visones han sido llevados a la muerte.

El costo de este vasto proyecto de asesinatos con fines de salud pública será de hasta 785 millones de dólares. El gobierno deberá también retribuir a las más de mil granjas que viven de la cría de visones.

Se trata obviamente de un día negro para el sector industrial que se dedica a los visones y quizá un golpe letal. Millones de animales que se vuelven víctimas de las empresas económicas del ser humano en un planeta que ha llegado a un punto de estrés crítico. Por lo demás, la mutación del virus ocurrida en las granjas de visones demuestra que, en efecto, en tanto la explotación indiscriminada de la naturaleza persista, más pandemias nos esperan, como han dicho ya varios científicos.

 


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