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Gráfica de la fobia y el asco animales

Un grupo de investigadores de la República Checa ha averiguado las reacciones que presentan los seres humanos a una serie de animales con los que interactuamos frecuentemente. Los investigadores expusieron a un grupo de voluntarios a imágenes de 24 animales que la literatura médica ha registrado como fuentes de fobias animales, en un intento de entender los mecanismos o funciones de dichas fobias.

Los resultados no son sorprendentes, siendo las arañas y las serpientes los animales que más temor generan, pero las arañas, además, son las que más repugnan. En esta última categoría las arañas son superadas por algunos gusanos, los piojos o las lombrices. Más abajo se encuentran las cucarachas y las ratas. En el caso de los animales más atemorizantes, aparecen entre los primeros lugares las avispas, los toros, las hormigas y los perros.

La gráfica es bastante clara. Sólo hay que mencionar que evidentemente los investigadores no pudieron hacer un sondeo completo, incluyendo animales más raros o algunos otros que son comunes, como por ejemplo, los mosquitos (para quienes quizá habría que incluir otra categoría, la de "irritantes").  

Comúnmente se explican las fobias como reflejos atávicos de tiempos remotos cuando el ser humano estaba más expuesto a ciertos animales, y se convierten en algo así como "miedos innatos". En este sentido se pueden explicar quizá los lugares que ocupan las serpientes y las arañas, o también el disgusto ante los parásitos. Pero por otro lado, ciertos animales relacionados clínicamente con fobias, como las ratas y las lagartijas, no producen mucho miedo. Así que probablemente exista una mezcla entre factores culturales y factores de memoria genética, aunque el estudio no es para nada concluyente.

 

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Imagen de portada: The Fly, David Cronenberg (1986)