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Investigación en Italia determinó que gigantes de los smartphones incurrieron en prácticas de obsolescencia programada

Una investigación en Italia determinó que ciertos teléfonos celulares se vuelven más lentos e ineficientes después de actualizar su software, algo que se consideró que es responsabilidad de los fabricantes. 

En la investigación se halló que Apple y Samsung incurrieron en la práctica de "causar serios malfuncionamientos, reduciendo significativamente el performance, y acelerando de esta forma la sustitución del teléfono".   

Apple fue multada con 10 millones de euros y Samsung con 5 millones, ya que las autoridades consideraron que las prácticas de Apple eran más graves. En ese caso, el problema hallado fue en el software del iPhone 7 instalado en un iPhone 6. En diciembre, Apple aceptó haber alentado el performance de sus teléfonos con baterías degradadas, aunque señaló que lo hizo para evitar problemas de un apagón completo y no para acortar la vida del producto. Según las autoridades, en el caso de Samsung el problema fue con el Galaxy Note 4.

Un vocero de Samsung dijo a The Guardian que la compañía "no emitió ninguna actualización de software que redujera el performance del Galaxy Note 4. Por el contrario, Samsung siempre ha lanzado actualizaciones de software que permiten mejorar las experiencias de sus clientes". Apple no respondió a la petición de información que hizo The Guardian. La empresa de California enfrenta un proceso de investigación del Senado de Estados Unidos por el mismo tema; el caso incluye 60 demandas diferentes.