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Niños tailandeses rescatados de la cueva planean convertirse en monjes para honrar a buzo muerto

Sociedad

Por: Jimena O. - 07/19/2018

Los integrantes del equipo de fútbol que quedaron atrapados, han anunciado que quieren convertirse en monjes y dedicarle el mérito a un Navy SEAL que murió intentando rescatarlos

Los 12 jóvenes integrantes del equipo de fútbol "Jabalíes Salvajes", que se quedaron atrapados en una cueva por 10 días en Tailandia, se han convertido en una sensación mundial por su inspiradora historia. Los 12 chicos tuvieron que sobrevivir tomando gotas de agua que caían de las estalactitas e intentando no pensar en comida, para lo cual sirvió mucho la meditación que les enseñó su entrenador, quien había sido monje budista por 10 años. Finalmente fueron rescatados por una misión colectiva internacional en la que participaron buzos expertos, incluyendo un Navy Seal tailandés, Saman Kunan, quien murió en los esfuerzos de rescate.

De manera sumamente conmovedora, los chicos han anunciado, a través del padre de Duangpetch Promthep, que planean ordenarse como monjes dentro del budismo theravada, esto con el fin de dedicar el mérito al buzo muerto. En el budismo theravada la ordenación  es considerada un acto sagrado que acumula mérito, como explica el sitio budista Lion's Roar. Su ordenación será en un principio como novicios (nen), ya que sólo después de cumplir 20 años se es admitido propiamente como bhikkhu (monje en pali). Esto significa que, por el momento, la cantidad de reglas que deben seguir será un poco menor. 

Los chicos planean donar el mérito a la memoria de Kunan, quien, según la visión budista, podría beneficiarse de sus actos en sus siguientes vidas o incluso liberarse de la existencia cíclica o samsara. De acuerdo con el padre de Promthep, se está planeando la fecha para cuando las familias estén listas.

No cabe duda de que esta experiencia transformó la vida de estos adolescentes, quienes siempre podrán recordar lo que vivieron en la cueva y la gran generosidad de las personas que lograron salvarlos. Son afortunados, pues le han encontrado sentido a la existencia.