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Inicia una lista de viajes por realizar e incluye esta gran opción

Sin duda, habrás escuchado sobre los vuelos en globos aerostáticos, así como sobre las exposiciones de estos aparatos en varias ciudades de nuestro país. Teotihuacán se ha vuelto un punto clave para esta actividad, especialmente para los que andan de visita por la CDMX y hasta para los locales que necesitan ver el paisaje desde un punto de vista más alto, para volver a enamorarse de su ciudad.

 

La pregunta que se hacen muchos respecto de este viaje es: ¿qué tiene de nuevo conocer Teotihuacán volando en un globo aerostático? Y sobre todo: ¿por qué vale la pena hacerlo? Respondemos estas preguntas con las razones por las que deberías visitarlo ¡muy pronto!

 

Una experiencia nueva para revivirla siempre

Para empezar, los actos y vivencias nuevos de una persona la hacen lo que es, le enseñan a adaptarse y a ser más flexible. Por ello, este viaje podría convertirse en una transformación personal más allá del hecho de subirse en un globo de aire caliente: una forma de ver todo con nuevos ojos y de purificar tu mente con aires distintos. Y es que desde las alturas podrás contemplar todo muy pequeño; cada vez que subes más y más algunas cosas empiezan a dejar de verse pero, por más diminutas que sean, son detalles que le dan sentido a la vida y al mundo.

 

Aventúrate hacia nuevas alturas sin correr ningún peligro

Una vida sin aventura puede seguir siendo vida, pero con mucho menos sabor que la de los intrépidos y los valientes de este mundo. Por eso, esta experiencia es ideal para aquellos que no desean poner su vida en peligro extremo para sentir un poco de adrenalina en su día a día. Si quieres soltar algo, este es el lugar adecuado: ¡da un grito que se perderá en el aire! Dale a ese vuelo que provoca una sensación de libertad infinita un buen desconecte del piso, pero con “v” de vuelta a la realidad.

 

Vista panorámica de la antigua ciudad prehispánica

Por lo menos una vez en tu vida debes ver esta ciudad antigua, que fue diseñada de manera misteriosa y cuyo verdadero propósito se desconoce hasta la fecha. Parte de la historia de este sitio viene de los mexicas, quienes interpretaron a toda la antigua urbe cosmopolita como la ciudad del Sol, lo cual se nota desde las alturas al ver la distribución de las pirámides del Sol y de la Luna.

El mejor horario para ver “la ciudad de los dioses” en su máximo esplendor es por la mañana, ya que es cuando el cielo está más despejado y se generan las mejores corrientes de aire.

No hay mejor manera de disfrutar de las pirámides que a más de mil metros de altura, en un trayecto aproximado de 45-60 minutos y a una velocidad tranquila de 6km por hora.

 

Descubre una vez más

Si eres de la CDMX no tienes que viajar tan lejos para vivir esta experiencia un fin de semana, lo cual convierte a este en un increíble miniviaje “a la vuelta de la esquina”. Asimismo, si eres del resto de la república mexicana y ya visitaste Teotihuacán alguna vez, podrías aprovechar y realizar esta actividad única.

 

En conclusión, si tienes la oportunidad de hacer un viaje en globo por una antigua ciudad mesoamericana, aprovéchala. ¿Quién te asegura que podrás hacerlo cuando pases al Mictlán?

 

 

Fuente: visitmexico.com