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Fotografías capturadas con microscopios electrónicos nos muestran una intrigante selección de paisajes internos de las más diversas cosas

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Es curioso cómo algunas imágenes microscópicas se asemejan a corales, criaturas marinas, bosques acuáticos o paisajes espaciales. Como si lo diminuto fuera un universo bizarro del que vemos con los ojos, y lo extraterrestre fuera su referente más cercano. Henry Miller acertadamente decía:

En el momento en que prestamos mucha atención a cualquier cosa, incluso a una brizna de hierba, esta se convierte en un mundo misterioso, asombroso e indescriptiblemente magnífico en sí mismo.

Esta serie, titulada Blade Runner, incluye fotografías tomadas con microscopios electrónicos de barrido (MEB), los cuales permiten divisar los más pequeños átomos y moléculas en cualquier cosa. La presente colección, seleccionada y curada por Cargo, son imágenes extraídas de la compañía FEI (empresa dedicada a la producción y distribución de microscopios de electrones), que van desde tortugas marinas, sujetapapeles y nódulos de plomo hasta arterias y células rojas. 

Es gracias a esta tecnología en lentes y a la fina selección de Cargo que podemos contemplar en alta definición un repertorio de texturas inquietantes y exquisitas que son los componentes del mundo que vivimos. Una invitación, también, a mirar de cerca lo que tenemos enfrente, a prestar atención a lo más mínimo para visualizar el fantástico universo de urdimbres que lo compone.