Por: Jimena O. - 01/25/2011
Una masiva estrella ha sido capturada por el telescopio WISE huyendo de su ex compañera a través del espacio dejando un brillante arco de gas. La estrella Zeta Ofiuco, en la constelación de Ofiuco -el hombre con la serpiente-, tiene una masa 20 veces mayor que la de nuestro sol y sería una de las estrellas más brillantes del cielo si no estuviera cubierta por un velo de polvo. Hace mucho tiempo esta estrella orbitaba alrededor de una estrella aún más masiva que se convirtió en una supernova, lo cual propulsó a Zeta Ofiuco a un vuelo exorbitante a 54 mil millas por hora. Mientras ara el espacio, los poderosos vientos de esta estrella "escarban" polvo y gas en lo que se conoce como un "bow shock" (shock de proa), algo similar a la forma en la que la proa de un barco desplaza agua en su trayectoria. Aunque este arco brillante yace oculto bajo luz visible, la materia en el shock está tan comprimida que se calienta y brilla en longitudes de onda visibles para los ojos infrrarojos del telescopio WISE. Zeta Ofiuco ya está a la mitada de su tiempo de vida y como su ex compañera también terminará su existencia estelar explotando como una supernova. Tal vez sea un poco de pareidolia cósmica -el recurso de la pisque de proyectar su campo semántico en la naturaleza- pero a nosotros esta fina estela estelar nos recuerda un trazo de plumas de quetzal y hasta el Ojo de Horus, ese símbolo místico por antonomasia, que representa al Sol y al tercer ojo.
Una masiva estrella ha sido capturada por el telescopio WISE huyendo de su ex compañera a través del espacio dejando un brillante arco de gas. La estrella Zeta Ofiuco, en la constelación de Ofiuco -el hombre con la serpiente-, tiene una masa 20 veces mayor que la de nuestro sol y sería una de las estrellas más brillantes del cielo si no estuviera cubierta por un velo de polvo. Hace mucho tiempo esta estrella orbitaba alrededor de una estrella aún más masiva que se convirtió en una supernova, lo cual propulsó a Zeta Ofiuco a un vuelo exorbitante a 54 mil millas por hora.
Mientras ara el espacio, los poderosos vientos de esta estrella "escarban" polvo y gas en lo que se conoce como un "bow shock" (shock de proa), algo similar a la forma en la que la proa de un barco desplaza agua en su trayectoria. Aunque este arco brillante yace oculto bajo luz visible, la materia en el shock está tan comprimida que se calienta y brilla en longitudes de onda visibles para los ojos infrrarojos del telescopio WISE.
Zeta Ofiuco ya está a la mitada de su tiempo de vida y como su ex compañera también terminará su existencia estelar explotando como una supernova.
Tal vez sea un poco de pareidolia cósmica -el recurso de la pisque de proyectar su campo semántico en la naturaleza- pero a nosotros esta fina estela estelar nos recuerda un trazo de plumas de quetzal y hasta el Ojo de Horus, ese símbolo místico por antonomasia, que representa al Sol y al tercer ojo.