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El artista Paul Ramirez Jonas hace de Nueva York una geografía de rincones ocultos que descubre su espacio como un tesoro para sus ciudadanos.

La fascinación de lo secreto entra en el vigor "flaneur" de Nueva York para explorar la psicogeografía de la "gran manzana" con llaves que abren un rincon oculto en la anatomía de esta ciudad. La atracción de encontrar un tesoro se vuelve una obra de arte público y un excelente pretexto para recorrer el espacio bajo la conciencia de la magia.

La idea de "The Key to the City" es del artista hondureño Paul Ramirez Jonas en colaboración con el grupo Creative Time, jugando con el cliché de darle las llave de la ciudad a altos dignatarios, evidentemente como participación pop mística entre los verdaderos habitantes de la ciudad, descubriendo sus rincones "mágicos", además de ser un proyecto que entona con el turismo local.

Ramirez Jonas exhorta a las personas a regalar las llaves a otros en honor a una cualidad especial o a un acto, para representar su propio juego de descubrimiento.

Entre algunas de las cosas que desocultan estas llaves están una exposición de joyas Faberge en el Brooklyn Museum, un jardín de vegetales privado en el Bronx o una bola de helado de Eddies Sweet Shop. Otras llaves abren puertas de cementerios, puentes, rascacielos, textos, etc.

La iniciativa cuenta con el apoyo del gobierno de la ciudad y de varias marcas de alto prestigio. Hasta el 27 de junio se repartirán en un quiosco de Times Square más de 25.000 llaves con sus instrucciones y que abrirán compartimentos secretos hasta el 6 de septiembre.

Algunos viajeros del planeta anteriormente han dejado regalos en lugares ocultos de las grandes urbes, para mostrar a aquellos que consideran especiales (o por el sincromístico azar) una parte del antiguo misterio de un tesoro sin dueño, cuya naturaleza es sólo la epifanía de compartir un secreto. El autor de esta entrada recuerda con enigmático placer un tesoro de mescalina y navegación mágica oculto en el "laberinto rojo" que es Londres en honor al Capitan Robert Falcon Scott.

Creative Time (fotos de los secretos)