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¿Es "El proceso" la mejor película de Orson Welles?

Arte

Por: Jimena O. - 08/31/2016

Revisitando la versión cinematográfica del clásico de Kafka que Welles consideró su mejor película, lo cual no es poca cosa

Ciudadano Kane, dirigida por Orson Welles, es considerada por muchas personas la mejor película de la historia. Esto evidentemente es discutible, incluso por parte del mismo Welles, quien en una entrevista dijo que su mejor película era El proceso, su adaptación de la inquietante novela de Franz Kafka. Por si eso fuera poco, la competencia incluye películas como F for Fake y La dama de Shanghai, que también están tocadas por el genio. 

En este angustiante clásico el protagonista despierta para darse cuenta de que ha sido arrestado, acusado de cometer un crimen indeterminado --lo cual se ha asociado con la caída o con el pecado original, pero que Kafka nunca hace explícito y simplemente teje alrededor de ello un intrincado y burocrático laberinto. Otros sugieren que es sobre la paranoia y el conflicto entre el individuo y la autoridad. Sobre esto Welles señala que una buena película y un buen libro deben estar abiertos a diversas interpretaciones. Así que hay que verla. Sirve para ampliar la perspectiva de nuestro lente acostumbrado a, y avasallado por, los grandes blockbusters y el ritmo frenético del cine hollywoodense moderno.

Welles dijo: "El proceso es la mejor película que jamás hice... nunca he estado tan feliz en mi vida como cuando la filmé". La película logró superar grandes escollos y juntó un elenco de primer orden, así como un prespuesto --nada desdeñable en ese entonces-- de 1.3 millones de dólares. Se filmó en Yugoslavia porque el Partido Comunista no permitió acceso a la República Checa. La cinematografía de Edmond Richard, barroca y con un virtuosismo expresionista de contrastes y gran angular se queda en la retina, especialmente esos grandes edificios iterados en el horizonte como monumentos a la alienación (que denota cierta influencia a posteriori del totalitarismo). Welles toma un papel también, como suele ocurrir en sus películas, es el abogado de K. y el principal antagonista. 

 

Con su grandilocuencia característica, declara que no es una película basada en el libro sino inspirada en él y en la cual Kafka es su colaborador y socio. Imprimir el sello de Welles (dice el mismo Welles) es de alguna manera ser fiel y respetar a Kafka, haciendo una película en 1962 de un libro de inicio de los 20. Era otro mundo.