El fino techno andino de Matanza y la nueva ola de electrónica latinoamericana
Arte
Por: Luis Alberto Hara - 12/30/2015
Matanza es uno de los exponentes de una nueva ola de música electrónica latinoamericana que incorpora ritmos locales para crear sonidos bailables globales
Desde Chile llega Matanza con su electrónica lúdica que no sólo mezcla ritmos folk y tribales con otros más urbanos y sintéticos, también mantiene una rica paleta de sonidos que parecen originarse en maderas, cueros, vientos y metales --epítome del ecléctico mix de instrumentos acústicos con sintetizadores; toda una polifonía de materiales y texturas que crean una agua cristalina, llena de amplitud, que nunca se desborda.
Matanza crea espacios lo mismo para bailar intensamente que para divagar en contemplaciones metafísicas, para relajarse y salirse de la autopista. Podemos sumar a Matanza a las propuestas que fusionan ritmos ancestrales locales con las punzadas de la música global de una escena electrónica que permea a todas las grandes urbes. Proyectos como Matanza renuevan los sonidos de una geografía, hacen un poco de medicina energética.
¿Cómo escuchan este dub retrofuturista, de antiguos esplendores indígenas redivivos, ecos para nuevas épicas en las llanuras o en las montañas, en busca del viejo El Dorado? Sin duda, música con gran profundidad de campo, alegría y explosión en el último cuarto de la cancha.
Vale mencionar que este trío chileno ha elegido el camino de no vender su música y dedicarse entonces a tocar en diferentes festivales en todo el mundo y con todo el mundo. Han colaborado con artistas como Acid Pauli y Joke, estando en la primera línea de la dosificación de brisas bailadoras, de refrescos con groove, de páramos para oxigenar la biocomputadora humana. Este track es una joya (que apenas anticipa lo que viene). Paz dentro del pandemónium:
Anteriormente en Pijama Surf reseñamos el excelente disco A Guide to the Birdsong of South America, una antología aérea de trabajos sonoros en torno a la voz temática de las aves más representativas del continente. Ahí tenemos la excelente "Gallineta Chica" de Matanza, un tech-house chicloso con giros ornitológicos.
Además de Matanza, que creemos es uno de los actos que despuntan en la escena latinoamericana, nuestros amigos de Comunité han hecho una selección de lo que consideran que es una representación significativa de lo que está ocurriendo en la electrónica de nuestro continente, con actos como Nicola Cruz, Jonn & Juann y Tin Maaaan, entre otros, todos los cuales podrán ser escuchados el 13 de enero en Tulum en un festival independiente que regresará a la comunidad algunas de sus ganancias para proveer servicios.
