Foto: Morteza Nikoubazl/ReutersHashem Shaabani de 32 años fue condenado a muerte y ahorcado el 27 de enero en una prisión de Irán. Los cargos que se le imputaban eran los de ser un "enemigo de Dios" y el de amenazar la seguridad nacional. Poeta reconocido y activista en contra de la discriminación de los iraníes árabes en Juzestán (para lo que fundó el instituto científico y cultural Al-Hiwar), Shaabani fue encarcelado en febrero o marzo del 2011; en julio del 2013 un tribunal revolucionario lo condenó junto a otras 13 personas por "hacer la guerra contra Dios".
El problema con las teocracias es que el gobierno asume la potestad de sentirse ofendido en nombre de dios. A pesar de los intentos del presidente iraní, Hasán Rouhani, para dar una imagen de moderación y apertura con Occidente (manteniendo cuentas de Twitter y Facebook, aunque estos servicios estén prohibidos en su país), el hecho de que Shaabani criticara la represión de minorías árabes en terrotorio iraní fue suficiente para que el régimen lo viera como un enemigo —y lo tratara como tal.
El caso de Shaabani se suma a la persecución de activistas, intelectuales, periodistas y bloggers en los países árabes y alrededor del mundo. Un tribunal árabe encontró al blogger Raif Badawi culpable por por cargos de apostasía, y se encuentra también en la ruta al patíbulo.
Desde que Rouhani tomó el poder en agosto del 2013, más de 300 iraníes han sido ejecutados por "hacer la guerra contra Dios".
Siete razones por las que debo morir
por Hashem Shaabani
Durante siete días me gritaron
¡Estás haciendo la guerra contra Allah!
Sábado, ¡porque eres árabe!
Domingo, bueno, provienes de Ahvaz*
Lunes, recuerda que eres iraní
Martes: Te burlas de la sagrada Revolución
Miércoles, ¿no alzaste tu voz por los otros?
Jueves, eres un poeta y un bardo
Viernes: eres un hombre, ¿no es eso suficiente para morir?
*Ahvaz es la capital de la provincia iraní de Juzestán.
Twitter del autor: @javier_raya