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Si la felicidad también cumple años, este es su rostro cuando llega a los 100 (FOTOS)

Por: Luis Alberto Hara - 04/06/2013

“Venerable” puede utilizarse, en ciertos contextos, como un sinónimo de “anciano”, porque en cierta forma pocas cosas que encarnen mejor la dignidad y el respeto como aquellas personas que han alcanzado una edad avanzada y, en no pocos casos, bien aprovechada. En este sentido la vejez es ese momento en que el misterio del paso del tiempo sobre la existencia se resuelve (sin resolverse realmente).

En esta serie fotográfica su autor, el alemán Karsten Thormaehlen expone uno de los mejores rostros de la vejez, aquel que conserva la belleza que dan la felicidad y la alegría, ese brillo que al cubrir un rostro lo iguala con cualquier otra manifestación de lo bello en sí y quizá incluso lo lleva más allá de todas estas categorías para situarlo en una región donde estas pierden significado e importancia.

“My glass shall not persuade me I am old / So long as youth and thou are of one date”: “Mi espejo no podrá gritarme: ‘¡Viejo!’ / Mientras la juventud y tú sean uno”, dice Shakespeare (en traducción de Fernando Marrufo) en su Soneto XXII. ¿Y no podría ser que aquí el amante a quien va dirigido el poema no sea otro más que la felicidad misma? ¿No se podrá decir, con el Bardo, que la vejez no es tal mientras se ame la felicidad (que acaso sea una forma de decir que se ama la vida?

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Imágenes vía BuzzFeed