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Cuando Walter Szulc pensaba que ese día moriría, un milagro lo salvó de ser devorado por un tiburón blanco en playas de Estados Unidos.

 

WHDH-TV -

Mientras Walter Szulc remaba en las apacibles aguas de Cape Cod, Estados Unidos, un enorme tiburón blanco aparentemente lo acechaba.

Las personas de su alrededor miraban con estupor la escena. Al momento de percatarse de que el monstruoso animal estaba detrás de su kayak, Walter comenzó a remar rápidamente. Las cosas, para fortuna de Walter y su familia, resultaron bien, ya que el escualo sólo se acercó a inspeccionar esa zona de la playa.

Según los salvavidas, los tiburones se ven atraídos a Cape Cod por una rica y proteica fuente de alimentación, las focas.

Tras el encuentro, la playa permaneció cerrada por un par de días en espera de que otro de estos animales volviera a presentarse en la playa.

El común de la gente piensa que la presencia de un tiburón es sinónimo de ataque. En realidad sucede todo lo contrario, anualmente se registran cerca de 50 ataque en todo el mundo.

Datos del Archivo de Ataques de Tiburones revelan que desde 1580 solamente se han registrado 2400 ataques. 

[Huffington Post]