*

En una medida un tanto confusa en sus intenciones, la WTA (Asociación Femenil de Tenis) busca implementar dispositivos y reglas que penalicen los gruñidos que emiten las mujeres tenistas.

Como todo deporte, el tenis tiene momentos en que sus practicantes demuestran la intensidad del encuentro, el calor emocional generado en una competencia en que el talento personal se encuentra a prueba y en entredicho frente al rival que pone todo su empeño en salir triunfante.

En el llamado “deporte blanco” es bastante frecuente que se escuchen exclamaciones, gritos espontáneos y en cierta medida primitivos que son una suerte de válvula de escape para el esfuerzo físico y emocional propio de un partido.

Con todo, la Asociación Femenil de Tenis (WTA, por sus siglas en inglés) ha planteado la posibilidad de que todas estas expresiones se regulen y, en su caso, se penalicen durante los encuentros oficiales, esto con ayuda de al menos tres lineamientos iniciales.

En primer lugar, un dispositivo que mida objetivamente el nivel sonoro de los gemidos femeniles; segundo, una regla que distinga los niveles aceptables de los no aceptables entre estos ruidos y, por último, un programa entre las academias de tenis que erradique con reducación esta práctica.

Aquí una muestra de lo que la WTA busca regular:

 

Pero quizá la pregunta central es por qué la WTA intenta imponer un control sobre estas manifestaciones de entusiasmo: ¿las considerará poco elegantes, poco propias de las atractivas mujeres que participan en los torneos de tenis?

[DeadSpin]