En la teoría clásica de la economía el dinero y, en general, todos los procesos económicos son procesos racionales. Sin embargo, las recientes crisis y algunos otros comportamientos socioeconómicos como el consumismo han puesto en duda esta idea, tanto como para llevarla a la arista opuesta y pensar que la economía se rige más de lo que creemos por mecanismos irracionales de los que, obviamente, formamos parte y contribuimos a implementar.
En un documental presentado por la Televisión Española se hace un repaso por estas dos formas de concebir la economía, proponiendo que justamente haber llevado al extremo la racionalidad de la economía —suponiendo que todos, aun en nuestros actos más nimios, realizamos los cálculos más precisos al momento de tomar una decisión, cualquiera, que afecta nuestros intereses económicos— condujo eventualmente a una contradicción con las conductas no necesariamente racionales que tenemos como individuos en lo que respecta a nuestra finanzas personales.
Con experimentos aparentemente sencillos que sin embargo revelan mucha de esta irracionalidad, se ejemplifica cómo somos capaces de ir en contra de lo que los acartonados cánones económicos, con los cuales, por cierto, se elaboran muchas de las políticas públicas y de mercado que configuran el escenario económico contemporáneo.
El reportaje plantea la posibilidad de que ese modelo teórico de la economía esté equivocado al menos en lo que respecta a la racionalidad que imputa a los individuos y los agentes en su comportamiento económico. Quizá en la economía, como en otros ámbitos científicos y no, sea momento de cambiar de paradigma y aceptar que la irracionalidad, el caos, el azar, lo imprevisto, también inciden en procesos que durante mucho tiempo se han considerado asépticamente racionales.
Para ver el documental El poder del dinero de Malcolm Clark sigue este enlance.