*

Playboys tras las rejas: la prisión venezolana que es una fiesta de bikinis y reggeaton

Por: Luis Alberto Hara - 06/10/2011

La prisión de San Antonio en la Isla Margarita cuenta con un DJ, piscinas, mujeres en bikini, peleas de gallos y demás distracciones

Adentro de la prisión se escucha reggaeton en los altosparlantes, chicas voluptuosas mueven sus caderas en bikini bajo, el sol del Caribe ocasionalmente echándose un chapuzón en la piscina, el humo de la marihuana embalsama el aire, pinturas del logo de Playboy llenan las paredes como el sello de la casa y los reos se pavonean ampliamente, algunos con armas de alto calibre. Esta fiesta es la prisión de San Antonio en la Isla Margarita en Venezuela, donde los reclusos tienen las riendas de la acción.

La mayoría de los internos llegaron ahí por tráfico de drogas y sobra decir que no es una prisión de máxima seguridad. Las instalaciones de San Antonio cuentan con más de tres albercas financiadas por los mismos presos —donde sus familias se regodean—, los visitantes van a la prisión a comprar drogas —ya que solo catean al entrar pero no al salir— y la joya de la corona: una arena para peleas de gallos que genera una buena cantidad de ingresos para estos playboys detrás de las rejas.

Un prisionero con cámara y laptop sirve como el fotógrafo especial de las fiestas, realizando montajes de los prisioneros en Photoshop en los que aparecen con chicas y autos viviendo la buena vida.

“Encuentro difícil explicar lo que es vivir aquí”, dice Nadezhda Klinaeva, quien cumple una sentencia por tráfico de drogas. “Este es el lugar más extraño en el que jamás haya estado”.

¿Quién lo habría de decir? Muchos seguramente se harían encerrar en esta cárcel solo por pasar unos cuantos días de diversión.

[Ver video de esta prisión en el NY Times]