*

En una emotiva historia de tecnología y amor filial, un abuelo invidente logra "ver" por primera vez a su nieto luego de "recuperar" la vista gracias a unas gafas biónicas.

Luego de perder la vista el mayor sueño de Elias Konstantopoulos a sus 72 años era ver a su nieto, quien nació después de que sus ojos dejaran de funcionar. Desde hace cinco años, y tras un par de décadas de notar como su vista disminuía, Konstanoupolos quedó completamente ciego a causa de una enfermedad degenerativa conocida como retinitis pigmentosa que afecta, tan solo en Estados Unidos, a más de tres mil personas.  Sin embargo, este sueño esta más cerca que nunca, e incluso ha podido probarlo por un instante, gracias a la revolucionaria tecnología.

La esperanza regresó al mundo de Konstanoupolos gracias a un nuevo dispositivo llamado Argus II, y cuyo uso, tras tres años de pruebas, ya ha sido autorizado en el mercado estadounidense y europeo. El Argus II consta de un sistema de gafas "biónicas" que consiste en un electrodo que va adjunto al nervio ocular y el cual esta conectado a una cámara inalámbrica, la cual a su vez se encuentra montada en las gafas. Gracias a esto el ilusionado abuelo ya ha comenzado a percibir luminosas siluetas como parte de un proceso que implica la familiarización de su cerebro para eventualmente recuperar, en algún sentido, la vista. Y además, la empresa responsable de esta tecnología, Second Sigh, ha manifestado que se encuentra permanentemente afinando el funcionamiento de las gafas. Por lo pronto Konstanoupolos ha podido al menos disfrutar de percibir la silueta de su nieto lo cual consagra su experiencia como una historia de amor filial y agradecimiento neurotecnológico.

[DailyMail]