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Daniel Pinchbeck plantea hackear las herramientas de las corporaciones para reprogramar la sociedad global y crear un nuevo sistema operativo cultural; transmutar, también, la brujería inherente al sistema corporativo en magia para emitir información que modifique y enalze la conciencia del planeta

Daniel Pinchbeck, el periodista que busca integrar el chamanismo a la construcción social moderna, creador del sitio de información alternativa Reality Sandwich y de la red social para el intercambio de herramientas evolutivas, Evolver.net podría haber escrito un texto seminal, el cual nos gustaría fuera recordado como un hito en la transformación del paradigma cultural que padecemos (leer texto en inglés). Aunque puede que sólo sean las teorías disparatadas de una persona que sueña con llevar sus visiones psicodélicas a la praxis social sin pisar la tierra, flotando en el éter caleidoscópico, queriendo hacer de mandalas estructuras de interacción humana (Pinchbeck es el Mark Zuckerberg de las redes sociales psicodélicas: nos gustaría que fuera el Mark Zuckerberg no sólo de la cultura psicodélica, sino del mainstream. Apoyamos el plan de hackearlo).

Pinchbeck propone un modelo basado en el “chamanismo de negocios” y en la “alquimia corporativa”: “usar las herramientas de corporaciones para reprogramar la sociedad global y distribuir un nuevo sistema operativo cultural”. Es decir, hackear el sistema desde dentro y usarlo favor en un movimiento de judo. Para algunos la alternativa es salirse del todo del sistema dominante sin admitir ninguna concesión y crear algo nuevo fuera de la “rejilla” y del ojo que todo lo observa”. Pinchbeck, tal vez ingenuamente, pero ciertamente con la luz fresca del optimismo, cree que lo más inteligente es hacerlo desde dentro, mordiendo el pezón de la bestia para beber su leche y transformarla en elixir energético de cambio. A diferencia de “Zeitgeist”, Pinchbeck cree que la transformación puede darse con lo que ya existe, con una alquimia de la estructura material e ideológica con la cual hemos construido este paradigma que se mece en el abismo.

Como casi cualquiera que sea parte de la capa de información colectiva del planeta Tierra advierte, Pinchbeck ve en el sistema actual, con su polarización, con el cambio climático, con la explotación de los recursos en los cuales está basado el paradigma socioeconómico, y con la emergente conciencia colectiva que se resiste a ser esclavizada y controlada, un punto crítico cercano en el que el sistema dominante va a tener que colapsar. Esto no significa ciertamente que la insurrección, que el nuevo sistema que emerga, sea la utopía luminosa que imagina el new age u otras subculturas. Es posible, que la primera señal de esta ruptura, de este punto sin retorno, sea la intensificación del control fascista, orwelliano. Pero lo que parece indudable es que entre este colapso y esta resistencia del mismo sistema a colapsar se está generando ya una energía excitante:

“La historia muestra que cuando la reforma es imposible, la revolución se vuelve inevitable. Desafortunadamente, la primera  fase de la revolución que se acerca en los Estados Unidos probablemente sea el surgimiento del autoritarismo sin tapujos, un fundamentalismo fascista. Las cosas ya están cambiando increíblemente rápido, y la aceleración e intensificación de los eventos -caos, novedad, peligro, oportunidad- sólo se volverá más veloz de aquí en adelante”.

Pinchbeck detecta que a través de la historia estas oportunidades revolucionarias han surgido y fallado en implementar un sistema que transforme el planeta hacia un paradigma que no fomente las estructuras jerárquicas opresoras fuera de equilibrio con el espíritu de la naturaleza. Aunque quizás nunca en nuestra historia hayamos llegado a un punto tan crítico -tan potencialmente destructivo y a la vez creativo-. Propone:

“No imponer una ideología única, sino crear una estructura que soporte un movimiento de bases locales, que de poder y permita a las personas a despertar como agentes políticos, ayudando a sus comunidades a convertirse en los que Jefferson llamó “repúblicas elementales” dentro de una verdadera red planetaria. El modelo de participación “a código abierto” (open source) de producción social puede reemplazar a una jerarquía vertical o formas de organización de arriba hacia abajo. Una orquestación alternativa de personas y poder que no es conspicuamente antagónica podría tomar forma y dirección a través de las tecnologías sociales del internet... Un nuevo sistema - de democracia participativa, anarquismo, economía angelical- podría, potencialmente, surgir del viejo. Incluso si no sucede vale la pena intentarlo”.

Esto nos recuerda un poco a la posibilidad planteada por Michael Bauwens , justamente en un artículo en el sitio de Pinchbeck, de que las redes entre iguales, P2P, hagan que el próximo Buda sea un colectivo que evolucione a la iluminación como conciencia hiperestimulada compartida.

Uno de los grandes dilemas que la transformación social enfrenta actualmente, desde el lado práctico y desde el lado filosófico, es la concepción del dinero, el cual ha sido una energía decadente que generalmente corrompe todo lo que toca, incluyendo las intenciones desinteresadas,  mágicas, artísticas. Y sin embargo, también, el dinero se ha convertido en una energía, hasta cierto punto creativa, que corre (auqnue corroe) por las venas de nuestra sociedad. ¿Abandonar el dinero del todo, o transmutarlo?

“Sólo fue después de otro viaje de hongos que el hongo me dio una nueva perspectiva: ‘No pienses en el dinero como mierda (como antes lo hacía)’, me susurraron. ‘Piensa en elcomo fertilizante’... Tenemos una gran oportunidad para trabajar la transformación desde dentro del vientre de la bestia del sistema económico y mediático. Considera este involucramiento como una especie de acto iniciático y práctica mágica que tiene que ver con mimetismo, retórica, hechizos, la transmutación tántrica de las materia obscura en fuerza de luz. Hay numerosas razones por las cuales pienso que es necesario. Una razón es que el dinero funciona como una palanca social -aquellos con recursos tienen la posibilidad de hacer cosas y hacer que las cosas sucedan, mientras que aquellos sin éste están varados fuera de la cancha... Un plan de negocios o de proyecciones futuras es un tipo de conjuro mágico, desarrollado para enfocar poder y catalizar la actividad humana. Los íconos corporativos son considerados sigilos, símbolos ocultos que ayudan a amalgamar energía y dar a la consciencia una forma particular”.

Aquí Pinchbeck toca un tema interesante, las corporaciones y los gobiernos de la elite están usando un sistema de magia que funciona. Están haciendo magia negra con este sistema colectivo que se proyecta a través de la tecnología y de la noósfera, usando poderosos símbolos y una de las reglas básicas de la magia que es dirigir la intención. Están cooptando el futuro, porque son los únicos que transmiten colectivamente al futuro. El futuro es maleable, la realidad es maleable y es como si sólo ellos lo supieran y nos “malearan” o  “malearan” el futuro usando nuestra energía colectiva. Pero nosotros podríamos hacer magia blanca. En Pijama Surf hemos hablado ya alguna vez del poderoso símbolo del ojo en la pirámide, del ojo omnividente, el tercer ojo, el símbolo del despertar espiritual, de la glándula pineal, el ojo de Horus y de los Iluminati.  Como un ejemplo: ¿Por que no hackear este poderoso símbolo masónico para liberar el proceso de iluminación, para democratizar el misticismo evolutivo, el despertar de la conciencia global? Enseñarle a los niños que ven televisión en los campos desolados de nuestros países a usar ese símbolo, y esa glándula, para su propio poder personal, para ver lo que no quieren que vean. No sólo alquimia corporativa, alqumia educativa.

“Los mitos de la modernidad y de la posmodernidad se están deshaciendo pero no hay nada listo para reemplazarlos. Por esto la mayoría de las personas están confundidas, extraviadas y no tienen idea de que hacer. Necesitan dirección de alguna forma. Nuestra sociedad necesita un nuevo modelo de liderazgo. Aquellos que se han embarcado en el duro proceso de reconocer su naturaleza psíquica e integrar el material de su propia sombra necesitan dar un paso hacia adelante a los roles de liderazgo, perder el miedo a volverse visibles o de volverse poderosos... para recrear a la sociedad misma como un proyecto de arte, acorde a los valores innatos y universales”.

Pinchbeck nota una tendencia en el consumo de información y en la forma en que la humanidad con los nuevos medios está transformando este consumo. En un bombardeo de información gratuita pre-empaquetada , más allá de lo que las corporaciones intenten “Lo que a las personas todavía les importa -y les importará más y más, y estarán dispuestos a pagar- son las experiencias directas, in-mediatas que son participativas y auténticas, oportunidades para obtener conocimientos de verdadero valor y herramientas que mejoren la calidad de vida. También buscaran fuentes confiables para que les ayuden a ordenar y entender la avalancha de hechos verdaderos, infotenimiento y desinformación”.

Este es el papel que asume Reality Sandwich, Evolver.net y al cual aspira Pijama Surf, a liberar y a ayudar al procesamiento de la información que potencialmente puede transformar la conciencia. La alquimia como modelo fundamental de todo proceso vital:

“Uno de los preceptos de la alquimia es transformar los venenos en medicinas. Entre más poderoso el veneno, más poderosa la medicina que contiene. Corporaciones, entidadades legales a las que se les otorga una ficticia “personalidad”, son los motores más potentes de transformación planetaria que el hombre ha ingeniado. En esta fase final del capitalismo post-industrial donde la producción inmaterial se ha convertido en el conductor  central de la vida económica, la forma corporativa puede ser transmutada de un veneno a una medicina, re-intencionada para transformar a la sociedad, de una cultura de la ruina a una de la regeneración”.

La definición de su visión chamánica de un nuevo sistema socioeconómico:

Lo que llamó  ‘chamanismo de negocios” es la readaptación de las herramientas e instrumentos de la cultura corporativa y la economía del mainstream para traer cambio social, renacimiento arcaico, regeneración planetaria, una iniciación más profunda”.

Pinchbeck señala que la cultura dominante se ha apropiado de los valores contracultarles,  de las mejores ideas del arte, de la misma energía rebelde para sustentar y perpetuar sussistema consumista, como usando “Star Spangled Banner” de Jimmi Hendrix para vender autos o la imagen del Che Guevara para vender camisetas o hasta asociarla con Coca-Cola. Ya que este sistema egoísta y consumista no es el estado natural de los seres humanos, debe de ser reforzado con implantes artificiales como un virus mental. Pero nosotros podríamos hacer lo mismo -hackear la máquina de transmisión masiva, el ojo en la pirámide electrónica- para difundir un sistema basado en diferentes valores:

“Un nuevo sistema cultural operativo puede proveer una nueva serie de ideales, patrones de pensamiento y normas conductuales. El sistema mental actual dominante puede ser revertido, las herramientas de los medios usadas para diseminar un nuevo ethos de responsabilidad con la tierra, entrelazado con prácticas regenerativas, autodependientes y adaptativas. Los medios masivos pueden proyectar su código reescrito a la mente masiva, incluyendo distintos mitos, memes, mensajes y alternativas de estilos de vida...  La siguiente y, sin embargo, lógica fase en esta danza es que la oposición defina una alternativa deseada y coopte las herramientas de la propaganda y los instrumentos financieros de la cultura dominante, y rediriga o invierta el momentum del sistema como un todo”.

La revolución expandiéndose desde el centro del sistema como un virus holístico, olas de conciencia diseminándose por las redes satelitales y el espectro radioeléctrico, la tecnología regresando al servicio de la tierra y del espíritu del cual se formó. Por ahora son sólo palabras, pero suenan bien. Suficientemente bien para repetirlas y dejarlas que corran por el planeta -a la velocidad de la luz que llena las venas de cuarzo de la tierra- y tal vez se materialicen, como ocurría originalmente con el acto mágico de nombrar. Ese podría ser el Logos de nuestra Compañía.